EL HORNO NO ESTA PARA BOLLOS
- El Pañuelo
- 15 jul 2016
- 1 Min. de lectura

La eliminación de Boca Juniors de la semifinal de la Copa Libertadores generó múltiples reacciones. Pocos creían que el modesto y desconocido Independiente del Valle de Ecuador, podría hacerle frente a uno de los equipos más grandes del mundo.
El partido de ida había terminado 2 1 en favor de los ecuatorianos. Los hinchas xeneizes llenaron la Bombonera para jugar su partido y darle al equipo de Guillermo Barros Schelotto el impulso que necesitaba para dar vuelta al resultado, avanzar a la final y poder definir el título de la copa ante Atlético Nacional.
Un gol en los primeros minutos hacia crecer la ilusión, 1 0 para Boca, la presión y la eliminación pasaban del lado visitante. Un empate rápido y la presión regresaba al local. Empate a 1 en el entretiempo y muchos hinchas esperaban que pasaran cosas en el túnel.
Ya tienen algo de experiencia en eso de "manejar un resultado en el medio tiempo"; no sucedió y en cambio el modesto, el chico, el desconocido y subestimado Independiente del Valle, convertía 2 goles en pocos minutos y lograba un hecho sin precedentes: nunca, en toda la historia de la Copa Libertadores, un equipo eliminaba a River y Boca en la misma edición.
Todo Ecuador celebraba la inolvidable clasificación. Una vez más David vencía a Goliat y demostraba a todos que los sueños imposibles pueden hacerse realidad. La Bombonera reconoció la derrota, Boca deberá esperar para lograr la 7ma Libertadores. Mucho se hablará de la hazaña; lo único que quedo claro, es que en este momento "el horno no está para bollos", claro, hace falta un Panadero.
Comments